Mi buen querer

La novela tenía los títulos provisionales de Tierra del Sol y Espejismos.

En el primer capítulo, había una referencia a las novelas La indomable y Fiera radical, cuando en la primera escena se mostraron letreros con las distancias de Santo Tomás de Atrás hasta las ciudades vecinas Greenville y Tubiacanga.

Marília Pêra, insatisfecha con el giro que tomó su personaje, pidió abandonar la serie.

Por su interpretación, Marília recibió el trofeo Máster a la mejor actriz aquel año.

La historia está ambientada en la ciudad ficticia de Santo Tomás de Atrás, en la costa noreste de Brasil (Ceará) y gira en torno a cuatro jóvenes que se conocen desde la infancia: Antônio Mourão (Murilo Benício), Rebeca (Alessandra Negrini), Livia (Flávia Alessandra) y Juliano (Leonardo Brício).

Juliano está enamorado de Livia, quien, aunque ella lo rechaza, le gusta provocarlo.

Pero tendrá que enfrentarse a la resistencia de una bollera llamada Toña (Arlete Salles), quien se rebela contra la villana.

Ignacio, junto con su mejor amigo Martín (José Mayer), llegan a convertirse en el prefecto y viceprefecto.

Ignacio y Ava soportan el dolor de haber perdido a dos hijos gemelos en un incendio que destruyó la guardería donde estaban, poco después del nacimiento.

Y no solo los niños son humillados, sino también su sirvienta, Georgina (Rosi Campos).

Acompañado por un grupo de seguidores fanáticos, decide vivir dentro del bosque que rodea a Santo Tomás de Atrás y planea llevar a su hija Ester con él, pero Rebeca se escapa con la niña y se esconde en un galpón abandonado.

En la escena final, el elenco se baña en una lluvia de estrellas fugaces.