Por ello, el pueblo cercano recibió el nombre de Hojapil, que se traduce del turcomano como «elefantes sagrados».
[3] El nombre del pueblo y la antigua leyenda sobre huellas inusuales indican que los residentes locales las conocían desde hacía mucho tiempo.
Fueron ellos quienes indicaron la ubicación de las huellas a los historiadores y geólogos turcomanos locales, que elaboraron informes científicos al respecto en la segunda mitad del XX.
En esta zona, los científicos han descubierto unas 3000 huellas de dinosaurio bien conservadas y 31 rastros.
Además, las huellas de megalosaurios son las más grandes jamás encontradas datadas en el Jurásico.