Fue edificado en 1879 con un estilo modernismo, siendo el último de los mercados municipales construidos en el siglo XIX.
De todos ellos este y el de los Mostenses se encuentra funcionando a comienzos del siglo XXI (ambos profundamente remodelados).
Surge como necesidad de abastecimiento del núcleo urbano que se encontraba en el ensanche.
Ha sufrido varias reformas, la primera en 1943 con la renovación de su interior, la segunda en los años ochenta rescató el edificio de un posible abandono.
Se remodela completamente en el año 1943 y posteriormente en los años ochenta.