La orilla meridional del Sena asciende suavemente hacia el bosque de Fontainebleau.
Aquí ganó la ciudad su divisa: Fida muris usque ad mures («Fieles en los muros hasta las ratas»), ya que hasta los roedores hubieron de comerse los defensores de la plaza.
[cita requerida] En el siglo X, los Capetos construyeron un castillo —iniciado por Roberto el Piadoso— que les servirá ocasionalmente de residencia hasta el Renacimiento.
Su desmantelamiento se inició en 1696, para servir a la restauración del puente sobre el río Sena.
[cita requerida] El priorato de San Salvador (en francés, Saint-Saveur) se estableció a inicios del siglo XI.
Otros molinos, fijos e instalados en las orillas o en los puentes, se dedicaban a lavaderos, pero fueron desapareciendo (el último en 1837), por entorpecer el tráfico.
[cita requerida] En 1847, llegó el ferrocarril: una estación en la línea de París a Lyon y Marsella; es el inicio del fin de la sirga, que persistirá, con importancia decreciente, hasta el primer tercio del siglo XX.