Una estructura por más grande que sea, si no cobija actividades variadas, no tiene la clasificación de megaestructura sino de estructura grande.
Justamente aquí recae la diferencia entre megaestructura arquitectónica y de ciencia ficción.
La Gran Muralla China, la primera megaestructura propiamente dicha fabricada por el hombre.
Existen propuestas de físicos e ingenieros que describen megaestructuras físicamente plausibles, aunque no necesariamente con la técnica presente, que podrían ser construidas en un hipotético futuro.
Pese a ser especulativas, los que las proponen tratan de demostrar que sus características (por ejemplo, la resistencia de sus materiales) no violan lo permitido por la física.