Si bien las fuentes de los medios alternativos también pueden estar sesgadas (a veces con orgullo), el sesgo tiende a ser significativamente diferente al de los medios tradicionales, por lo tanto, "alternativo".
En muchos países en desarrollo, los únicos medios disponibles, particularmente a nivel nacional, son las estaciones de radio y televisión y los periódicos controlados por el gobierno.
La autocensura es el acto de censurar o mantener confidencial el propio trabajo por temor o deferencia a las sensibilidades de los demás sin que una autoridad lo presione directamente para hacerlo.
En los países de capitalismo pluralista, la autocensura también puede ocurrir, particularmente para ajustarse a las expectativas del mercado.
Por ejemplo, el editor de una publicación periódica puede evitar consciente o inconscientemente temas que enojarán a los anunciantes o a la empresa matriz de la publicación para proteger su sustento.
Estos esfuerzos pueden tomar muchas formas, desde financiar el establecimiento de un medio de comunicación completamente nuevo hasta ayudar a un medio existente a mejorar su capacidad profesional.