Meconopsis

La legendaria "amapola azul del Himalaya" (Meconopsis betonicifolia) forma parte de él.

Por lo general, debido a su origen de alta montaña, odian las altas temperaturas y los aires secos.

La tierra ideal para las Meconopsis será rica, de tendencia ácida, con alto contenido en materia orgánica, profunda y húmeda, pero sin encharcar.

El repicado de las plántulas es delicado, pues no son amigas del trasplante: hay que hacerlo con sumo cuidado, sin apretar apenas, utilizando un sustrato a base de turba y arena gruesa silícea.

Mantener las plantas repicadas en un entorno luminoso (aunque libre de sol directo) y aireado.