Los países de la zona del euro participan automáticamente en la supervisión bancaria europea.También pueden participar otros países de la UE que aún no han adoptado el euro.El MUS es el primer pilar establecido para conformar la Unión bancaria europea y operará conjuntamente con el Mecanismo Único de Resolución.[3] Algunos economistas permanecían escépticos, apuntando que la composición de la junta directiva del MUS fuera un problema.Los bancos clasificados como significativos serán directamente supervisados por el BCE y los menos significativos por las ANC, aunque el BCE puede pedir para sí la supervisión directa de cualquier banco.Este último se reúne dos veces al mes para debatir, planificar y ejecutar las tareas de supervisión del BCE.Si la autoridad nacional supervisora designada por un Estado miembro no es un banco central nacional (BCN), el representante de la autoridad competente podrá estar acompañado por un representante de su BCN.En tal caso, los representantes se considerarán un solo miembro a efectos del procedimiento de voto.Esto, en principio, implicaría que el BCE no llevara a cabo su papel supervisor en dichos Estados.Sin embargo, otros países de la UE cuya moneda aún no sea el euro pueden decidir participar.Para ello, sus supervisores nacionales pueden establecer un acuerdo de «cooperación estrecha» con el BCE.[7] Ello a condición de que las ANC posean los mecanismos necesarios para poner en marcha las medidas vinculantes del BCE.