Me gusta ser una zorra
El sencillo es un hito en la historia del punk español y es una buscada pieza de coleccionista.Al igual que la canción original, «Me gusta ser una zorra» tenía un alto contenido sexual, tratado sin tapujos y con un lenguaje soez y obsceno, buscando la provocación, cosa habitual en los grupos punk de la época.Desde este diario se exigió a la dirección de la televisión pública que tomara medidas.En este caso, el grupo arremete contra la Iglesia católica y lo que ellas consideraban doble moral.En 2022 el músico madrileño José Riaza lanza una nueva adaptación libre en su álbum Cleptomanías II.