Empezó estudiando piano pero después cambió a la guitarra.
Inició su carrera de concertista a los 18 años, rápidamente fue considerado como un virtuoso del instrumento.
Esto da como resultado una sonoridad y color diferente, más acorde con las piezas que se tocaban (actualmente sigue vigente).
También era muy característico por tener una postura diferente a la hora de tocar.
Escribió alrededor de 80 piezas para guitarra publicadas mayoritariamente en Meissonnier.