Su nombre quiere decir textualmente "la de la falda azul", por su color evidente y sus laderas largas.
En lengua yumhu se llama Mhu Ye (Diosa de la lluvia) y como los pueblos nahuahablantes, la representan como una mujer mitad humana y mitad culebra y se narra que se aparece de esa forma a los pobladores tlaxcaltecas.
Los demás dioses, preocupados por la situación, se reunieron y después de conversar largo rato, decidieron que lo que le hacía falta era una nueva esposa, siendo la elegida Chalchiutlicue.
Al casarse, ella se convirtió en la diosa de las aguas dulces.
En ese momento surgieron nuevos ríos y lagos, mientras que Tláloc complacido hacía caer una lluvia benévola sobre la tierra.