Fue un alumno de Giulio Quirino Giglioli.
Inspector en 1933, se convirtió en superintendente de las antigüedades de Roma y tomó la dirección del Museo Nacional Etrusco de Villa Giulia.
También participó en la creación del Instituto Nacional de Estudios Etruscos en Italia, y su periódico Estudios etruscos.
Su primer ensayo, "Etruscologia", publicado por primera vez en Milán en 1942, fue un best seller, traducido a varios idiomas.
Recibió en 1991 el "Cavallo d'Oro di San Marco".