Masacre de Chekka

[2]​[3]​ Desde Trípoli, una ofensiva en represalia por el Sitio de Tel el Zaatar[2]​ fue comenzado con un bombardeo que duró más de dos horas por la OLP y un grupo islamista llamado Jundallah, junto a miembros del Ejército Árabe del Líbano, pertenecientes al Movimiento Nacional Libanés.

Dentro de los atacantes, había mercenarios sirios, paquistaníes, libios, sudaneses, y somalíes.

Enfeh fue capturado por el Ejército Árabe del Líbano, el cual se acercaba peligrosamente a Chekka y Hamat, causando que el Frente Libanés y sus organizaciones (Falanges Libanesas, Guardianes de los Cedros, Ahrar, Tanzim, entre otras) se movilizaran rápidamente a la zona, estableciendo un área de operaciones entre Batroun, Amioun, y Ain Akrine, todo con el fin de evitar la caída de Chekka y una posible entrada a Keserwan, el principal bastión del bando derechista del conflicto.

Por órdenes de Bashir Gemayel, los Falangistas posicionados en Kfarabida se movilizaron bajo el liderazgo de Edmond Sahyoun y tomaron varios monasterios cercanos para evitar que los palestinos los tomaran primero y posicionaran su artillería en ellos.

[4]​ Los civiles intentaron desplazarse y escapar a través del túnel de Ras el Chaqaa hacia Batroun, el cual fue bloqueado por las fuerzas izquierdistas, las cuales quemaron varios automóviles, acabando en varios fallecimientos por quemaduras y asfixia.