UU. que publicó un total de quince ediciones en dos colecciones diferentes, ambas editadas por Robert O. Erisman.
Tras 1931, año en el que se lanzó “Miracle Science and Fantasy Stories” (“Ciencia Milagrosa e Historias Fantásticas”) la producción de revistas de ciencia ficción se detuvo repentinamente durante varios años.
Aparte de esta revista marginal, en 1937, los Goodman empezaron a publicar varias “weird-menace pulps”.
A estas les siguió Marvel Science Stories, revista editada por Robert O. Erisman, y que no tenía intención de formar parte del género weird-menace pulp.
Puede que esta palabra en concreto fuera elegida para atraer anunciantes como Marvel Home Utilities y Marvel Mystery Oil, o puede ser que simplemente a Martin Goodman le gustara la palabra porque se parecía a su nombre.
Erisman y los hermanos Goodman le pidieron a Kuttner que “animara” un poco sus trabajos para Marvel Science Stories.
Todo lo que puedo decir es: POR FAVOR, en el futuro, eliminad esa basura de vuestra revista”.
Aunque algunas historias no abundaban en este contenido excitante, otras si lo hacían con “mujeres atrapadas, quemadas, o sino maltratadas con látigos de manera frecuente y aburrida” según cuenta el historiador de ciencia ficción Joseph Marchesani.
La intención es que fueran revistas de entregas bimensuales, pero esto jamás se consiguió.