Martín della Torre

La vida política de la ciudad estaba polarizada entre los partidarios de la aristocracia y los del pueblo llano, hasta que estalló la guerra civil.

Los Visconti eran una familia de la pequeña nobleza que estaba prosperando en sus negocios y comenzaba a rivalizar con los Della Torre para arrebatarles el poder.

Aunque este triunfo fue muy efímero, pues el cargo eclesiástico quedó sin cubrir hasta que en 1262 el Papa, sin ninguna oposición, nombró a Otón.

Por otra parte, los Visconti derrotados consiguieron que algunos nobles de la oposición se aliaran con el líder gibelino Ezzelino III da Romano.

Ezzelino había sido o era potestà de Vicenza, Verona y Padua, y aprovechando esta alianza decidió lanzar una ofensiva contra la liga güelfa dirigida por Martino en Lombardía.