Llegó a prestar servicio en el Protectorado de Marruecos, donde estuvo destinado en la Mehal-la Jalifiana de Tetuán.
[1] Llegó a participar en la Guerra del Rif, tomando parte en diversas acciones militares.
En 1929 —estando todavía destinado en el Marruecos español— se inició en la masonería, afiliándose a la logia Tetuán n.º 64 que se encontraba en la ciudad homónima.
[1] Tras el estallido de la Guerra civil se mantuvo fiel a la República, integrándose posteriormente en el Ejército Popular de la República.
[3] Finalizada la guerra marchó al exilio, instalándose en México.