Martín Cabral

En los tiempos de Carlos Gardel fue un buen cantor de tangos e inspirado compositor.

Fue padre de la cancionista Fedora Cabral y del músico Walter Cabral, exvocalista de Juan D'Arienzo, sus otros hijos fueron Norma y Martín.

Guitarrista de renombre, usaba el seudónimo Cruz Lucero.

[1]​ A lo largo de su trayectoria compuso tangos y rancheras como Fiesta asao y cimarrón (1953) con música de Francisco Lauro, La curiosa (1930) y Pena y huella.

[2]​ Cantó junto con Francisco Fiorentino temas como Maíz frito, La correntina y Al tranquito junto a la orquesta de D' Arienzo en 1929.