La creatividad de Yee no se limita a diseñar ropa, también elabora proyectos originales.
En 1992 abrió un salón de té que al mismo tiempo es un taller, coordinó la exposición “Fashion for Van Dyck” en Amberes o empezó a restaurar muebles, entre otras actividades.
Presta mucha atención a los detalles, utilizando telas bastas en combinación con materiales delicados como el satén en colores vivos.
Su objetivo es crear siluetas largas y delgadas, a través de las que las mujeres se pueden expresar.
Además, es pionera en diseñar ropa de materiales de segunda mano y pone el énfasis en moda duradera y asequible.