Marie Besnard

La herencia de los padres le fue dejada a Léon y su hermana, Lucie, quien en teoría se suicidó unos meses antes.

Poco después de esto, los Besnard alquilaron habitaciones a un rico matrimonio sin hijos, los Rivet.

Los Rivet habían nombrado a Marie Besnard como su única heredera.

Pauline murió tras confundir una noche un tazón de lejía con su postre, y Virginie cometió el mismo error una semana después.

Dos juicios terminaron sin que el jurado llegara a una conclusión, y un tercero acabó con la absolución, siendo Marie jamás condenada por crimen alguno.