Mariú

Sus penurias por la falta de dinero son más graves cada vez que a su madre, Piedad Sampedro, padece una crisis asmática.

Mariú deja en evidencia que el ladrón es el propio hijo del juez, quien usa el dinero robado para comprar droga.

Mariú sospecha de la manera como Heriberto quiere ayudarla y sale a buscarlo.

Mariú escapa por la ventana de su cuarto pues justo en ese momento Emiliano y otros oficiales entraron a la casa.

Ahí encontraron el arma con la que vieron a Mariú y la tomaron como prueba del delito.