Marcel Molinès

Su éxito deportivo más importante fue la victoria en una etapa del Tour de Francia en 1950, convirtiéndose así en el primer africano en conseguirlo.

En el Tour de 1950 tomó parte en un equipo formado íntegramente por ciclistas norte-africanos.

Ese verano fue extremadamente caluroso y durante la 13.ª etapa, entre Perpiñán y Nimes, el calor era tan asfixiante que muchos ciclistas se veían obligados a pararse a la orilla del mar para refrescarse.

La diferencia era tan grande que habría permitido a Zaaf convertirse en el nuevo líder, pero a falta de 15 km, sediento, agarró un bidón que le ofreció un espectador.

El bidón resultó ser de vino y como consecuencia Zaaf quedó un poco desorientado, reiniciando la carrera en dirección contraria y finalmente quedándose dormido al borde de la carretera.