Religiosamente eran devotos católicos y una familia levítica, pues cinco hermanas fueron religiosas y uno sacerdote.
María ingresó al monasterio de las concepcionistas de Chiquinquirá, hasta que conoció a la religiosa y fundadora Sara Alvarado Pontón, por quien formó parte del primer grupo de religiosas del instituto de Nazareth (conocidas hoy como Hermanas Dominicas de Nazareth).
[3] Algunas diferencias, en cuanto al carisma del nuevo instituto, hizo que María Benavídez se separara de la congregación.
[3] Es aquí donde la religiosa cambió su nombre por el de María Teresa.
Allí vivió María Teresa desde 1954 hasta su traslado a la casa de Chiquinquirá en 1983.