Manuscrito de Simancas

Su importancia radica en el escasísimo número de fuentes musicales manuscritas para vihuela que han sobrevivido.

Los fragmentos fueron descubiertos por Cristina Bordas Ibáñez y publicados por Antonio Corona-Alcalde en 1986.

Una edición en facsímil con transcripción de Antonio Baciero fue publicada en 1998.

A continuación se detalla el contenido del fragmento.

El fragmento más pequeño se encuentra dentro de la hoja plegada anterior.