Manuel Pavón Varela

Nació entre ellos una gran amistad que duró hasta la muerte del maestro, ocurrida en Madrid en 1929.

Gustaría mucho a los madrileños, puesto que estuvo contratado en este café durante nueve meses.

En sus primeros cantes, Manolo Pavón se nos presentaba ya como un cantaor hecho.

En los años 20 seguía triunfando en Madrid y tomando parte en acontecimientos importantes, la mayoría de ellos invitado por el propio Chacón, que siempre vio en él a su posible sucesor.

A los pocos años de terminar la contienda, como le resultaba difícil adaptarse a la nueva situación política y artística, se retiró y tuvo que hacer de todo para sobrevivir.