Se considera un precursor de la arquitectura racionalista y modernista.
Desarrolla su trabajo en su ciudad natal con obras como La Equitativa en la Alameda de Mazarredo (1934) y en Madrid con el edificio del Banco de Vizcaya en la calle de Alcalá.
Fue contemporáneo y compañero de Luis Blanco Soler y Fernando Arzadun Ibarraran.
Durante sus años de formación, compagina sus estudios con la práctica del fútbol, entonces un deporte no profesional, jugando en el Athletic de Madrid durante dos temporadas.
[2] En su carrera profesional de arquitecto proyectó y construyó edificios para instituciones bancarias como el Edificio del Banco de Vizcaya en Madrid, para aseguradoras como el Edificio La Equitativa en Bilbao, ejemplos de las dos ciudades que tienen una buena representación de su obra construida.