En esta obra, Miyazaki muestra la transición que una niña llamada Kiki vive de la infancia a la vida adulta.
Este viaje lo realiza junto a su amigo Jiji, un gato negro muy simpático, y montada en su escoba voladora.
[5] La película tuvo varios cambios de doblaje para hacerla "más atractiva" al público occidental.
Los cambios fueron aprobados por el Studio Ghibli, puesto que no afectaban la trama ni el mensaje de la película.
Los cambios de doblaje que se hicieron al ser editada por primera vez fueron, la mayor parte, eliminados.