En 1990 viaja a Italia, donde hace un curso de Inkscape and Graphic Design en el estudio del artista minimalista A.G.
En este mismo año participará en el Salón Pirelli, y realizará su primera individual en Venezuela; en ambas muestras, las instalaciones o Estructuras, tienen como elemento protagonista la línea, bien recta y fraccionada en puntos equidistantes, realizada con el empleo de numerosas esferas negras de goma; bien curva y sinuosa, realizada con láminas transparentes.
Para 1994, realiza una serie de trabajos caracterizados por estar asentados al piso; no ambientes etéreos y flotantes sino estructuras mórbidas y vibrantes, realizadas con delgadas barras de acero inoxidable.
En 1997 presentó, en el Museo Soto, su segunda individual y sin duda su propuesta más ambiciosa, en la que realizó una enorme instalación con tubos de diversas dimensiones cubiertos interiormente con un transmisor y difusor de luz, atados unos a otros.
En la actualidad, busca la creación de atmósferas visuales a través del empleo directo de elementos naturales: agua, luz, fuego, combinándolos con nuevas tecnologías (audiovisuales, fibras ópticas, etc.).