La denominación "Bt" deriva de Bacillus thuringiensis, una bacteria que normalmente habita el suelo y cuyas esporas contienen proteínas tóxicas para ciertos insectos.
Estas proteínas, denominadas "Cry" o cristal paraesporal, se activan en el sistema digestivo del insecto y se adhieren a su epitelio intestinal causando la formación de poros en el tracto digestivo larval, alterando el equilibrio osmótico del intestino.
[5] Otros países han rechazado el cultivo de este maíz por considerarlo peligroso para el medio ambiente (Austria, Grecia, Italia, Hungría, Luxemburgo, Polonia, Francia, Alemania e Irlanda).
[cita requerida] Otros insectos pueden sustituir a la plaga del taladro en los campos de maíz transgénico.
[7] Los únicos datos relacionados son experimentos en laboratorio en los cuales se alimenta a algunos insectos con toxina Bt directamente.
Es decir, con dosis mucho más elevadas de las que se podrían llegar a encontrar nunca en un ecosistema natural.