Mónica es un nombre propio que procede de la forma antigua griega monos, «uno solo, único».
[cita requerida] Tal y como la filosofía explica Monismo (uno) pluralismo (muchos).
En una traducción algo más libre es «solo una», aquel que vive de forma íntima, espiritual.
El tiempo y el valor positivo y elogioso que se dio a este sobrenombre, acabó convirtiéndolo en nombre[cita requerida].
Deriva del adjetivo monos (monos, el mismo con el que se formaron monarquía, monasterio, monólogo) que significa único.