Fue conocido como el Duque de Rambouillet.
Luis ostentó el título de Duque de Rambouillet desde su nacimiento, título otorgado a su abuelo, el conde de Tolosa, en 1711, por Luis XIV.
El padre de Luis, Luis Juan María de Borbón, era el mayor terrateniente de Francia y poseía una de las mayores fortunas de Europa, dado que Luis Juan María había heredado la fortuna del duque de Maine, su tío paterno.
A pesar de esto, Luis María no vivió para disfrutar la fortuna de su padre, Luis María murió en el Palacio de Versalles a los tres años.
Fue enterrado en la capilla del Castillo de Rambouillet, siendo después trasladado junto con los cuerpos de su madre, abuelos y hermanos a la Colegiata de San Esteban de Dreux, sus tumbas fueron profanados en 1793 y arrojados en una fosa común, su hermana Luisa María Adelaida de Borbón, esposa del futuro Felipe Igualdad, construiría en ese lugar la Capilla real de Dreux, siendo trasladados ahí sus restos.