Fue asambleario primero y presidente después del Consejo de los Quinientos durante la Revolución.
Como todos los hijos de la familia Bonaparte, Luciano realizó sus estudios en el continente francés, primero en Autun y después en Brienne.
Con apenas 15 años de edad, se entusiasma con las nuevas ideas que, desde París, barren toda Francia primero y Europa después.
Tras enviudar, casó en segundas nupcias con Alejandrina de Bleschamps, con la que tuvo otros 10 hijos más.
[3] En el plano político, es reconocido como un destacado líder del movimiento jacobino, llegando a tomar el nombre de 'Bruto' Bonaparte, en homenaje al homónimo de la antigua Roma que asesinara a Julio César para salvar la República.
Fue ministro del Interior en París[5] y embajador en España,[6] pero sus diferencias con su hermano Napoleón eran cada vez mayores, tanto por sus ideas políticas republicanas como por su carácter.
[7] Rechazando honores y excluido de la línea sucesora junto con sus descendientes, se exilió en Italia, donde llegó a formalizar una gran relación con el papa Pío VII, que lo acogió bajo su protección.