Love bombing

Se puede utilizar de diferentes formas y con fines positivos o negativos.

En 2011, el psicólogo clínico Oliver James defendió el bombardeo de amor en su libro Love Bombing: Reset Your Child's Emotional Thermostat, como un medio para que los padres rectifiquen los problemas emocionales de sus hijos.

[1]​ Las redes sociales modernas pueden intensificar el efecto del bombardeo amoroso, ya que le dan al abusador un contacto y una comunicación casi constantes con la víctima.

[3]​ Si la víctima no cumple con las demandas, comienza la etapa de devaluación: el abusador retira todo afecto o refuerzo positivo y en su lugar castiga a la víctima con lo que considere apropiado: gritos, reprimendas, juegos mentales, trato silencioso o incluso abuso físico.

Luego, cuando sienten que realmente tienen a la persona y se sienten seguros en la relación, el narcisista generalmente cambia y se vuelve muy difícil, abusivo o manipulador.