Se graduó como abogado, y en 1855 fue nombrado presidente del Göta Hovrätt, la Corte de Apelaciones de Götaland.
Entre 1867 y 1878 fue miembro por Estocolmo de la primera cámara en el Nuevo Riksdag, e introdujo y aprobó muchas reformas útiles.
Su mayor logro fue la reforma del sistema representativo sueco.
Las reformas introdujeron un parlamento bicameral y electo, en reemplazo de la engorrosa y poco democrática representación por estados, resabio de la Edad Media.
Además de algunas novelas y ensayos sobre estética, De Geer escribió algunas memorias políticas, de gran calidad tanto en el estilo como en la sustancia, las más notables de las cuales son Minnesteckning öfver A. J. v. Höpken (Estocolmo, 1881), Minnesteckning öfver Hans Järta (Estocolmo, 1874), Minnesteckning öfver B. B. von Platen (Estocolmo, 1886) y su propia Minnen (Estocolmo, 1892) una autobiografía, invalorable como documento histórico, en el que la experiencia política y los maduros juicios acerca de su vida están registrados con singular claridad, sobriedad y encanto.