Un grupo de "Bóxers" ataca el palacio, matando sin piedad a todos los guardias, y en ese momento, con ellos entra un hombre alto y distinguido: Lord Nelson Rathborne, que pretende robar el Sello Imperial.
Pese a los esfuerzos de Lin Wang y su padre, Rathborne le clava a este último una daga en el corazón, mientras el anciano mira la daga y murmura: "Wu Chow...".
En un hotel de Nueva York, en contra de lo que Chon creía, Roy no ha cambiado ni un pelo: sigue siendo un vividor fracasado y mentiroso, que busca su lugar en el mundo.
En el barco en el que han conseguido colarse de forma poco honrosa, Chon sigue furioso con Roy, a pesar de las torpes disculpas del antiguo bandolero.
Al bajarse del carruaje, Chow menciona que espera que se lleven mejor cuando Rathborne sea rey (Rathbone es el décimo en la línea de sucesión al trono) y Chow emperador.
Chon y Roy por fin llegan a Londres, donde se encuentran con la apatía de los ciudadanos, y Roy se molesta por el hecho de que éstos conduzcan por la izquierda.
Al descubrirlo, Roy, furioso, se lanza tras él, seguido de Chon.
En una lujosa casa, en donde, no se sabe cómo, Charlie ha conseguido colarles, Chon y Roy planean su siguiente movimiento.
Chon afirma que lo mejor es matar a Rathbone en cuanto lo tengan enfrente, pero Roy replica que así solamente conseguirían ser considerados asesinos locos, como Lin, y Lin jamás saldría de la cárcel.
Al principio intentan integrarse entre los demás en el salón de baile-comedor, pero a Roy le desagrada la comida británica, y Chon se enfrenta a una hipócrita conversación con Rathbone, resistiendo las ganas de matarle, así que deciden buscar el Sello sigilosamente.
Lin les pilla, y, avergonzada, sale huyendo, topándose en un puente cercano con el famoso asesino en serie Jack el Destripador, a quien reduce sin problemas, y arroja al Támesis.
Rathbone y Wu Chow dejan a los dos amigos atrapados en una trampa que los arrojará al Támesis, y Roy tiene tiempo de revelarle a Chon que el oro del emperador no lo invirtió en zepelines, sino que fue él quien escribió los libros de "Roy O'Bannon contra la Momia", que Sage Mc Alistair en realidad no existe, y de decirle que en verdad está enamorado de su hermana, y éste le da su bendición con condiciones: si Roy le hace daño a su hermana, se las pagará.
Chon rescata a su hermana, y le dispara a Wu Chow con un cañón lanzador de fuegos artificiales, haciendo que el malvado chino literalmente explote en pedazos, e impidiendo el magnicidio.
Rathbone está cobardemente escondido en el interior del Big Ben, y hacia allí se encaminan Chon y Roy, haciendo una dificilísima subida por el famoso monumento, hasta que Rathbone asoma la mano, arrojando aparentemente al pobre Roy al vacío.
Por poco, él también se cae, pero Roy, que no había muerto en realidad, le salva.
En una solemne ceremonia, la Reina nombra caballeros a Chon, Roy y Doyle.
Roy le intenta ayudar de manera brusca, y el puzzle se abre, revelando una bonita piedra con una inscripción en chino: "La familia es para siempre, hijo.
En un carruaje de clase media, Roy y Chon discuten sobre qué hacer ahora.