Fue la última que película Rissi grabó antes de morir.
Al plan se suma Rosa, un mujer inteligente que los ayuda, sin embargo, esa noche en el cementerio son testigos de una operación delictiva comandada por un grupo de mafiosos que se dedica al lavado de dinero.
A partir de esto, Atilio, Beto y Rosa comienza su propia investigación para resignificar su vida.
[5] En una reseña para Ámbito Financiero, Paraná Sendrós escribió «Martín Piñeiro evitó, por suerte, los artificios del cine publicitario.
Tampoco se aprovecha demasiado al resto del elenco, pero nadie es perfecto».