Posee un notable promontorio, rodete o penacho de plumas en su cabeza que comienza en el pico con color gris y corre hacia atrás a medida que va aumentando de tamaño y tomando un color pardo rojizo al llegar a la parte posterior de la cabeza y cuello.
En las aves jóvenes el penacho es más sencillo, de color pardo.
Se encontraron siempre en gran cantidad en zonas selváticas, pero lamentablemente su número está en descenso debido a la continua deforestación.
La paloma de penacho rara vez se hace escuchar, porque gorgea un suave arrullo.
En cambio, suelen pelear entre sí, y cuando lo hacen emiten un chillido corto parecido al de un cerdo.