Desde que la isla pasó a estar bajo el control del gobierno, su acceso es limitado y sólo viven en ella algunos guardas forestales.Sin embargo, desde que el gobierno neozelandés adquirió las tierras, se han reforestado todas las hectáreas de la isla, excepto 20.[9][9] Los kākāpō (loros nocturnos), también en peligro crítico de extinción, fueron trasladados por primera vez a Little Barrier Island en 1982.[10] Más tarde, en 1999, se retiraron todas las aves para poder erradicar las kiore (ratas polinesias) de la isla con cebos envenenados.[11] Hauturu es un lugar de prueba para comprobar si los kākāpō pueden reproducirse y criar a sus hijos con éxito sin intervención humana.
Un kōkako de la Isla Norte alimentándose en un coprosma en Little Barrier Island