Literatura en buriato

La gran obra épica buriata es el Gesar, que contiene unos 20.000 versos, recogidos en siglos posteriores por M. Khangalov, Ts.

Durante el siglo XIX apareció el llamado Drama de Ulus, influido por la literatura rusa, propagado por estudiantes buriatos de Irkutsk como D. A. Abashejev, S. P. Baldaev, I. V. Barlukov e I. G. Saltykopv, considerados los pioneros de la literatura buriata, con M. Khangalov y T. Zhamtzaranov, los compiladores del Geser.

Con la Revolución soviética apareció una nueva generación de autores buriatos, como el lingüista Gombozhab Tsybikov (1873-1930), el narrador Khotsa Namsarajev (1889-1959), con el poema La confesión del viejo Hielen (1926) y las novelas Tsyrempil (1935), Al amanecer (1950) y El azote de Taixa (1945), el continuador Solbone Tuia (P.N.

Destacaron nuevos autores como D. Dashinimaev (1904-1937), B. Bazaron (1907-1966), Bavasan Abideev (1909-1939) con Shalai y Shanai (1939), Ts.

Posteriormente destacaron Chimit-Dorzhi Tsyndendambajev (1918) con Dorzhi hijo de Banzar (1953), Zhelmai Khabarhaa ekhildeg (El año empieza en primavera, 1960) y Lejos de las estepas nativas (1959); Zh.