Se trata, por consiguiente, del momento donde las distintividades triviales quedan suspendidas, lo que precisamente permite "el paso" entre una condición social y otra.
Los espacios liminales son objeto de una estética de Internet que retrata lugares vacíos o abandonados que parecen inquietantes, desolados y, a menudo, surrealistas.
En general, las imágenes del espacio liminal representan lugares anormalmente vacíos y oníricos.
La investigación del Journal of Environmental Psychology ha indicado que los espacios liminales pueden parecer espeluznantes o extraños porque caen en un valle inquietante de arquitectura y lugares físicos.
[3] Un artículo de Pulse: the Journal of Science and Culture ha atribuido esta inquietud a lugares familiares que carecen de su contexto observado habitualmente.