El torneo empezó el 25 de noviembre de 1934 con un empate a dos tantos con Asturias, para después hilvanar 12 triunfos consecutivos, una marca de todos los tiempos, aún vigente en el fútbol mexicano.
Necaxa solo perdería en la penúltima jornada 3-1 con España, ya con el título de liga asegurado.
[2][3][4] Los seis participantes disputan el campeonato bajo un sistema de liga, es decir, todos contra todos a visita recíproca, más una tercera vuelta, igual todos contra todos, pero con el orden y localía de los partidos sorteado, para concretar 15 juegos por equipo; con un criterio de puntuación que otorga dos unidades por victoria, una por empate y cero por derrota.
El campeón sería el club que al finalizar el torneo haya obtenido la mayor cantidad de puntos, y por ende se ubique en el primer lugar de la clasificación.
En caso de concluir el certamen con dos equipos empatados en el primer lugar, procedería una serie a ganar dos de tres partidos entre ambos conjuntos; de terminar en empates dicho duelos, se alargarían a la disputa de dos tiempos extras de 30 minutos cada uno, y posteriormente a un nuevo encuentro hasta que se produjera un ganador.