[3] Suelen seguir este libro la mayoría de ramas cristianas pertenecientes a Concilio Luterano Internacional y Federación Luterana Mundial.
[6] En su lugar, el título del libro hace referencia al concepto latino de concordia para referirse a un "acuerdo conjunto"[7] que encaja con su objetivo y contenidos: textos cristianos que reúnen lo que para sus recopiladores eran creencias y enseñanzas creídas "con un solo corazón y voz".
Así, la Apología, los Artículos de Esmalcalda, el Tratado y la Fórmula de la Concordia se considera que explican, defienden o complementan dichas confesiones.
Se usa el término latino "quia" (porque) para indicar que en las iglesias luteranas una persona suscribe el Libro de la Concordia "porque" es una expresión de las Sagradas Escrituras.
Ello lleva implícito que quien suscribe ha examinado dichos textos a la luz de las Escrituras para llegar a dicha posición, por lo que no se requiere aviso alguno como en el caso de que se dijera "quatenus" (mientras).
Algunas iglesias luteranas, sin embargo, usan esta forma de adhesión para indicar que toman el Libro de la Concordia como un hito histórico para guiar sus enseñanzas, pero no necesariamente vinculante.