Lev Karaján

[5]​ Tres años después, se trasladó de nuevo, esta vez a San Petersburgo, aunque siguió visitando el Oriente, sobre todo Vladivostok, en misiones subversivas.

[1]​ Participó en las negociaciones entre el Gobierno moscovita e Irán, Afganistán, Jiva y Bujará.

[3]​ Tomó parte asimismo en la fundación de la Comintern e ingresó en su comité ejecutivo en 1919.

[3]​ Para entonces Karaján había pasado a desempeñar el puesto de polpred (embajador) en China (desde 1923), cargo que ocuparía hasta 1927.

[12]​ Defendió, al igual que Stalin, la cooperación entre los comunistas chinos y los nacionalistas del Kuomintang.

[3]​ A comienzos de los años treinta, mientras el futuro comisario de Asuntos Exteriores Maksim Litvínov era el encargado del ministerio para asuntos europeos, Karaján lo era para el Extremo Oriente.

A finales del mismo año la preocupación soviética por esta zona creció con la ocupación japonesa de Manchuria.

Karaján, en el centro, en Pekín en 1925.