La lencería se caracteriza por los tejidos finos y elegantes, normalmente bordados o guarnecidos de encajes sutiles.
Un campo extendido de aplicación de la lencería es la ropa interior femenina, hasta el punto de que, desde hace tiempo, el término tiende a asociarse única y exclusivamente con las prendas de ropa interior femenina atractivas y sexys, aunque a partir de la década de 1990 también se comenzó a utilizar para designar a la ropa interior masculina.
La lencería actual es funcional y elegante.
Suave, sedosa, ligera y normalmente semitransparente, constituye un acto de seducción para muchas mujeres y hombres.
La industria de la ropa interior se ha ampliado en el siglo XXI con diseños que también se pueden utilizar como ropa exterior.