Por su papel en la película, Maurice Ronet ganó el premio a Mejor Actor en el Festival Internacional de Cine de San Sebastián.
Christine intenta aprovecharse de Paul vendiendo la empresa, pero él se niega a firmar.
Ella se aprovecha de Paul al hacer que ceda sus derechos en la empresa.
Christopher, que ahora es dueño del negocio, aparece con una llamativa rubia, a quien Paul recuerda haber visto en Hamburgo y en la fiesta de la artista.
[1] En una reseña del The New York Times, el crítico Vincent Canby escribió: «El Sr. Chabrol ... ha hecho una película que tiene la forma y la estructura de un misterio de asesinato, pero que es, esencialmente, un drama social divertido y sardónico».