Laura Bassi

A la edad de 5 años recibió instrucción en lenguas con el padre Lorenzo Stegani.

Sin embargo, ella no se conformó y exigió ser incluida en ese grupo de intelectuales.

El Papa aceptó la petición de Bassi, creando una nueva plaza especialmente para ella, la vigésimo quinta, para que pudiese formar parte del Instituto.

[1]​ En 1738 Bassi se casó con Giovanni Giuseppe Veratti, médico y también profesor de la universidad.

Por ejemplo, podía celebrar conferencias públicas solo con el consentimiento del Senado.

En 1749, para paliar estas dificultades, inauguró un laboratorio privado, que se hizo famoso en toda Europa y acogió a científicos de renombre y jóvenes destinados a ser famosos.

Sin embargo, a pesar de representar un personaje tan célebre y ser una auténtica pionera para todas las mujeres que han dedicado su vida a la ciencia a lo largo de la historia, Laura ha quedado completamente ignorada y retirada al cajón del olvido con el paso de los años.