Los textos fueron enviados a la Universidad de Heidelberg para ser analizados y verificar su autenticidad.
[4] Según relató Garcés en el programa televisivo Cuarto Milenio, existía "la creencia de que las brujas eran una secta de adoradoras del diablo y que se dedicaban fundamentalmente a causar mal.
Las protagonistas de su libro eran mayoritariamente sanadoras o curanderas a las que se culpaba de cualquier desgracia que aconteciese, como una mala cosecha o un fallecimiento inesperado.
Según este investigador, sólo en la provincia de Huesca fueron ahorcadas o quemadas en la hoguera unas 120 mujeres entre 1461 y 1645.
Tras este debate, el alcalde de Laspaúles ajustició a las 24 encausadas, ahorcándolas en la plaza pública tras haber sido torturadas.