Los primeros testimonios de su existencia datan del tercer milenio a. C. Fue tomada por los medos en 614 a. C., siendo completamente destruida.Ilushuma fue su segundo sucesor quien realizó una expedición a Baja Mesopotamia aprovechando el caos de ésta.Al mismo tiempo que Assur iba creciendo, lo hacían también otras ciudades destacando como potencias como es el caso de Mari, Eshnunna y Simash.Se sabe que la actividad constructiva se reanudó unos pocos siglos después, durante el gobierno del rey autóctono Puzur-Aššur III, que volvió a fortificar la ciudad e incorporó los barrios del sur a las defensas principales.Durante el período neoasirio (912-612 a. C.), la residencia real se trasladó a otras ciudades de Asiria.Se conocen asentamientos en la ciudad desde los siglos XII y XIII, pero después solo fue habitada por beduinos nómadas.El «Palacio Nuevo» fue erigido más tarde en el noroeste de la ciudadela por Tukulti-Ninurta I (1244-1207 a. C.), y restaurado posteriormente por Senaquerib.En este edificio se han encontrado las tumbas de numerosos reyes asirios: Aššur-bel-kala I(1074-1056), Aššurnasirpal II (883-859), Shamshi-Adad V (824-811), y quizá también la del propio Senaquerib (705-681).