Lamentación sobre Cristo muerto (Mantegna)

Mantegna se concentró en un modo muy específico en retratar el trauma físico más que el emotivo, contrario, por tanto, al ideal espiritual.Sin embargo, el artista no hizo un uso estricto de la perspectiva, lo cual da a toda la imagen un aspecto "grotesco".Esto se refuerza con la rigidez del cuerpo, las heridas y el trazo incisivo, sin la menor concesión al idealismo.Sorprende la elección de colocar en el centro la zona genital, aunque cubierta, lo cual ha llevado a numerosas conjeturas.[5]​ Algunos estudios destacan que la perspectiva de escorzo da la sensación de que el cuello y la cabeza estén separados del resto del cuerpo, y lo relacionan con la cristología diofistia, la ortodoxa, según la cual en este momento Jesús está muerto como hombre, pero vivo en cuanto Dios.