En casa de los adinerados Covarrubias se espera con ansias (tanto por patrones como empleados) el regreso del oficial Bernardo (Héctor Noguera).
Más deshonrosa para Victoria es la reputación de su madre Encarnación (Paz Irarrázaval) quien en su juventud fue muy casquivana hasta que un terrible escándalo la serenó.
Sedujo al prometido de su cuñada Eduvigis y lo empujó a morir en un duelo.
Bernardo ha traído consigo a su ordenanza a Segundo (Ramón Nuñez) quien se incorpora al servicio doméstico de los Covarrubias y se enamora de la mucama Meche (Pilar Ruiz), pero Doña Encarnación les prohíbe casarse.
Tras el traslado al campo de Doña Encarnación para ocultar su demencia, se permite que Segundo se case con Meche y pase al servicio de los Sotomayor.
Esa misma noche Magdalena conoce a un intelectual medio revolucionario, Roberto (Alejandro Sieveking) de quien se enamora.
Para huir de la policía que anda tras los agitadores políticos, Rita y Segundo se unen a una compañía teatral ambulante.
Los Sotomayor han huido pero una turba asalta la casa y asesina a Eduvigis.
Ese mismo día Segundo que es obrero y Meche embarazada visitan a los sirvientes de los Covarrubias.