La quimera del oro

[8]​ En 1942 fue reestrenada en versión sonora, con un nuevo acompañamiento musical y narración en off del propio Chaplin.

Será un oso, cazado por fortuna al entrar en la cabaña, lo que les salve la vida.

Charlot prepara la cena con mucho esmero, pero Georgia, que se divierte en el cabaret, olvida la cita.

Logran encontrar la cabaña, pero en la noche el viento la lleva hasta un acantilado, donde la casa apenas se mantiene en equilibrio.

Logran salir vivos, y ven que en el preciso lugar donde estaban hay una mina de oro.

La película es reconocida por el American Film Institute en estas listas: En 1992, la película fue considerada «cultural, histórica y estéticamente significativa» por la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos y seleccionada para su preservación en el National Film Registry.

El motivo es que los propietarios del copyright no lo renovaron según establecían las leyes estadounidenses.

Chaplin en un fotograma de la película.
La película.